INTOLERANCIAS
Cuando la ajenidad del otro se vuelve irreductible
Cuando la ajenidad del otro se vuelve irreductible, en los múltiples semblantes de la alteridad, aumenta la espiral de intolerancias y toma sus formas más variadas en confrontaciones, polarizaciones, descalificaciones y políticas totalitarias.
Por eso Umberto Eco examina con minuciosidad de microscopio la naturaleza incorregible de la intolerancia, poniendo en advertencia que, si ella se convierte en una ideología, ya es tarde para combatirla, y aquellos que deberían luchar contra ella terminan siendo sus primeras víctimas.
Si de víctimas se trata, no es casual que hayamos elegido publicar nuestra última Conexión FEPAL a 532 años de la colonización de América. Existe una íntima relación entre el colonialismo y las formas contemporáneas de racismo, discriminación racial, xenofobia e intolerancia que sufren los africanos, afrodescendientes, personas de origen asiático y pueblos indígenas.
Los efectos del colonialismo incluyen la degradación ambiental, el subdesarrollo económico, la creación de perfiles raciales, el racismo sistémico y la existencia de infraestructuras sociales inadecuadas, lo que resulta en un acceso desigual a la salud, la educación y la justicia social.
Esta situación ocurre cuando el Otro dentro del colectivo falla en su función de instancia mediadora y reguladora, y el escenario social queda monopolizado por figuras omnipotentes, que pueden ser doctrinas, ideologías o regímenes. En este contexto, los individuos se encuentran desprovistos de un Otro y de otro, y su espacio psíquico se ve colonizado por
un exceso de realidad.
Ese mismo exceso de realidad fue el que llevó a Gustave Flaubert en su labor literaria a preguntarse ¿cómo proceder estéticamente con la innoble realidad? Y en esa dirección elegimos a Alejandro Avakian, artista argentinode ascendencia armenia, cuya obra pone en acto permanentemente la pregunta del escritor francés. A través de una intensa y extensa exploración plástica, el pintor invita al espectador a confrontar el dolor, la angustia y la
memoria colectiva, desafiando así la indiferencia y la intolerancia hacia el sufrimiento de otros.
El color comanda a través de una paleta intensa, furiosa, que, en contraste con blancos sutiles, crea composiciones que no siguen un relato clásico, por el contrario, a través de las manchas y los trazos emergen figuras, rostros que convocan a una nueva lectura.
Hemos seleccionado para representar este último número de Conexión FEPAL tres de sus obras, en la tapa “Los estadios de la conciencia” y en el interior, “Humanidad” y “Adiós”, todas producciones en óleo sobre tela.
En la sección Perspectivas tres psicoanalistas hacen un abordaje de la intolerancia, colocando el foco en diferentes ámbitos que van desde el micro mundo de la situación analítica, pasando por lo institucional y ciertos fenómenos sociales, hasta llegar a un universo territorial e histórico más amplio, en un intento de reflexionar sobre los genocidios de los pueblos originarios trasandinos.
En el trabajo “La intolerancia como respuesta inconsciente ante lo intolerable de la pulsión de muerte” Marcos Posadas lleva sus indagaciones al corazón de la práctica analítica y nos propone pensar “la intolerancia como indicador contratansferencial de prejuicios internalizados en el psicoanalista”. Este punto ciego que hace obstáculo en nuestra clínica,
también hace lo suyo en las instituciones psicoanalíticas que “no han sido inmunes al virus de la intolerancia, conjugada en sus discriminaciones interseccionales: racismo, clasismo, fobia a los grupos LGTBQ+”, comenta Jorge Bruce. En su artículo “Ça va (Todo bien)” además pone en evidencia la “invisibilización de los dramas de los latinoamericanos pertenecientes a las
clases desposeídas”. El autor advierte que la discriminación racista no se dejará erradicar por estar “enraizada en diversos períodos de nuestra historia personal y colectiva.” En este sentido, Pablo Santander en su texto “Sobre la intolerancia. Pensando un genocidio” señala cómo la evidente creencia omnipotente de una cultura sobre otra, con una clara descalificación
contribuyen a una destrucción activa o pasiva de esta última. Ciertamente el ataque a la identidad y la descalificación de la cultura conducen a la deshumanización que está en la base de todo genocidio.
Irene González Quintana, médica y estudiante de antropología, en la sección Intersecciones nos comparte algunas de sus experiencias en el trabajo con una comunidad atacama del noroeste argentino. La autora titula su trabajo con una frase de una joven atacama: “Vengo a decirles”. De esta manera, hace que algunas mujeres recuperen la voz silenciada por la intolerancia que anida en algunas sociedades patriarcales ancestrales.
En esta edición de Conversaciones, cerramos el ciclo de 7 entrevistas “En Lengua Viva, FEPAL Hoy” con la entrevista a la Directora de Publicaciones, Adriana Pontelli, a cargo de Ximena Méndez. Ambas, en un clima agradable y de mucha confianza, dialogan sobre los proyectos realizados durante la gestión, y sobre el desafío de llevar adelante las funciones de comunicar, ser enlace y publicar en los diferentes canales de FEPAL, con el fin de acercar el pensamiento psicoanalítico a un mayor número de personas y colaborar en la transmisión del psicoanálisis.
En Marcadores de Calibán Eloá Bittencourt Nóbrega nos presenta algunos títulos anteriores de esta revista, donde los lectores podrán indagar el tema de esta Conexión. También nos anticipa el próximo número de Calibán titulado precisamente “Intolerancias”, y aclara: “La intolerancia es plural”.
Por esto mismo consideramos que una realidad tan compleja amerita múltiples abordajes. Los invitamos a recorrer las páginas de esta Conexión, con el deseo que sus ideas y reflexiones provoquen un movimiento en el pensamiento. Disfruten de la lectura.
Adriana Pontelli y Cecilia Moia